Tras vivir y compartir la Semana
Santa, la vida en Korhogo ha vuelto a la normalidad. Las intensas celebraciones
han dejado su poso, sin lugar a dudas. Una Semana Santa que no olvidaré JAMAS.
En el centro Don Orione, se ha
retomado el trabajo como siempre, aunque con menos chavales, pues como los
escolares están de vacaciones, algunos se han otorgado “auto-vacaciones”. La
verdad es que muchos chavales vienen acompañados por sus hermanos o hermanas
antes de que estos últimos vayan al colegio, puesto que los padres se dedican a
vender en el mercado (por cierto, tengo que enseñaros alguna foto del mercado…
no tiene desperdicio!).
(Con Aimé en el centro)
La vida familiar, como de
costumbre, con la salvedad de que la casa está llena de niños, 11 exactamente. Al
ser vacaciones, la familia acoge a estos niños huérfanos que viven-malviven en
las casas de la “gran familia”. Así que os podéis imaginar lo agitado que está
el ambiente familiar! Ello ha provocado alguna discusión entre el matrimonio, y
para calmar los ánimos, el jueves decidí invitarlos en el “maquis” –especie de
bar al aire libre-. Todos, sobre todo Edith, estaban encantados. ¿Acaso esto no
significa también hacer misión?
Ayer viernes, al acabar el
trabajo, a las 17.30 horas, Alphonse me sorprende. Me entrega una bolsa y me
dice que a la noche voy a necesitar lo que hay en el interior. Miro… y se
trataba de una camisa africana color amarillo! Más o menos de mi talla! Me dice
que asistiremos a unos funerales a unos 5km de Korhogo, en moto. Me la pruebo,
y aunque al principio me veía un poco ridículo, después me gustó llevarla.
Nada más llegar al pueblo, fui el
centro de atención: ¿qué hace un blanco en el pueblo? Y ¡además con la camisa!
En el Pays Sénoufo, la familia encarga metros y metros de telas para
confeccionar camisas que regalan a los amigos de la familia. Y a mí, con este
regalo, me han considerado amigo! Sorprendente, y más que digno de agradecer!
Tras comer un poco… nos sentamos en el “Quartier Général”, sede del funeral,
delante de la casa de la familia. Había mucha gente, pero destacaba una
persona, en el centro sobre un sillón. Me comentaron que se trataba de un
diputado de la región, al cual rinden todos los honores. Los balafones
comenzaron a tocar sus instrumentos y… estalló el júbilo, con muchos bailes y
las mujeres agitando las colas de caballo para “ahuyentar los malos espíritus”.
Los músicos tradicionales tocaban delante de la gente que estábamos sentados, y
recibían billetes de dinero: los introducían en el bolsillo, se los daban a la
boca… Y llegó! Llegó el turno en que se plantaron delante de mí… dí dinero, por
supuesto, y me hicieron bailar. La gente reventó a reír, pero no como ofensa,
sino como alegría de que un blanco participara en sus ritos. La familia del
difunto estaba realmente encantada y no pararon de darme las gracias hasta las
22.30h, hora en la que volvimos a Korhogo. Sin duda, unas horas intensas. No
fue tanto una novedad, pues no es el primer funeral sénoufo al que asisto… pero
sí un ejemplo de alegría y de integración. Hoy me han comentado que en esta
etnia los funerales son el centro de la vida en comunidad, en parte porque no
existen festividades… y es verdad: todo el mundo participa en los mismos. El
pueblo entero.
(Con miembros de la familia del funeral)
(Jaleado por la multitud)
Espero que os interese lo que
acabo de escribir. Quizás me haya repetido un poco. En cualquier caso, se ha
tratado, una vez más, de un momento y una experiencia que nunca olvidaré.
Besarkada haundi bat guztiontzat. Comparto una canción africana que me ha encantado y que, como no podía ser de otra manera, me ha hecho recordar una vez más a mi amiga y "perli" Tamara, a la cual mando un beso enorrrrrme! (me tiene que prometer el baile!!)
Pues, Lander, la camisa te sienta bien... a pesar de no estar acostumbrado a esos dibujos y colores. Y quien midió "a ojo", acertó con tu talla. Amaia
ResponderEliminarJoe Lander, menuda diferencia, vas a comparar... un antes y un despues... menuda camisa mas chula que te han regalado... jajaja ;) Bromas aparte, creo que para ellos significas mucho, los gestos lo dicen todo... Una vez mas, un placer leer lo que escribes... Besarkada haundi bat!!! Bixen.
ResponderEliminarHola Lander.
ResponderEliminarMe encanta la total entrega y participación en todo lo que te ofrecen. Enhorabuena!!! De esa manera, estoy seguro que son vivencias muy ricas espiritualmente y te ayudan a vivir de una forma más comprometida la misión. ÁNIMO, ADELANTE.
Silvia
LANDER,estas estupendo con la camisa, ya que lo mas importe es el detalle con que te han obsequio y el significado de este me encanta verte como participas en todo, vaya experiencias tan fantanticas. Un besote grande de tu vecina ANA
ResponderEliminarSe te ve muy bien!!! Eres todo un ejemplo a seguir. La camisa te queda estupenda :-)
ResponderEliminarLander!!!!! Que alegría leerte! Y verte también!!! Que bien te integras con los bailes y todo, y la camisa, un acierto!!!! Un beso enorme y sigue asi!!!!
ResponderEliminarMuaaaaaaas!
Nerea B.
JOPE LANDER, VAYA CAMISA MAS CHUILI QUE TE HAS PILLADO, YA NOS PUEDES TRAER UNA PARA CADA UNO. MUSUSSSSS DESDE VILLA MARGARITA.
ResponderEliminarDe repetitivo nada, nos gusta leerte. Y más verte con esa camisa jejeje. Lo que representa es bonito pero no estamos acostumbrados a esos colores y nos hace gracia. Eso sí, todo un honor el que la llevas y como se dice el que vale vale. Muxus. Martx
ResponderEliminarLandertxo! me ha encantado el baile! (te lo dice una "bailarina"jeje) y ver lo integrado que estás, se demuestra al ver el detalle que han tenido con la camisa y al participar en el día a día de su vida cotidiana. La camisa te sienta muy bien aunque nosotros no estemos acostumbrados a esos colorines la verdad es que dan mucha alegría.
ResponderEliminarUn abrazo!!! Nidi.
Kaixo berriro ere!
ResponderEliminarMundiala zaude alkandorarekin! A ze oparia! Ikusten da bertan asko laguntzen ari zarela, guztiz integratua zaude!
Bestalde etxean zenbat ume batera! jajajajajaja, ez zara aspertuko!
Muxu handi bat eta goxo goxo bat!